En el interior añil del agua
de la Fuente de la Reja,
el hallazgo de sus perlas,
la dulzura de sus jardines,
la placidez de sus amaneceres,
la tibia calidez de sus crepúsculos.
Y en la esencia del agua de la Charca,
la ternura del abrazo diáfano y cristalino
entre sus hilos de plata.
Ineludible aureola blanca
cuando se mira la luna
en el tranquilo sosiego del agua
y en su espejo, la inesperada frescura,
la joya de su esplendidez.
Ya escucho la canción del agua
en el lago azulado de los sueños,
la gota fugaz que borda
nardos en un mar de olas,
la espuma blanca que vibra
en recónditas e ignotas playas.
Haces de luz en la niebla.
Los brillantes de la lluvia
se deshacen en el aire.
Agua, siempre agua
para saciar los corazones sedientos
Y sus gotas se deslizan silenciosas,
como rosas de pasión,
en el satén de sus pétalos.
http://trabajosdeencarna.blogspot.com
Poema que recibió una Mención Especial en el Concurs
Facultad de Poesía convocado en 2008 por la Universidad de Jaén.
1 comentario:
El agua es la misma vida, sin ella no viviríamos.
Bellos versos.
Besos de luz.
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